Estudiantes a estudiar
Sé que lo que voy a decir, puede ser usado en mi contra, pero lo admito: me gustaba ir al colegio.
Adoraba que empezaran las clases, los útiles nuevos, el olor de los libros (a veces nuevos, otras usados), forrarlos, escribir carátulas y encontrarse todos los días con las amigas/compañeras.
Desde que empecé el jardín de infantes, me gustó siempre asistir a clases. ¡No veía la hora que se terminara el verano!
¿Era traga? Puede ser, nunca me llevé materias. No me la pasaba todo el día estudiando, es más, estudiaba lo necesario pero no era mediocre ni tampoco la mejor de la clase, era simplemente buena alumna. Siempre tuve buenas notas y a veces fui escolta. Nunca me hice la rata, porque alcanzaba con decirle a mi mamá, "mañana no voy"... y ella me dejaba faltar.
Según mi hermana era una nerd aburrida. Pero no es cierto. En el colegio estaban mis amigas, organizábamos fiestas, actos y hasta misas (cualquier excusa era buena para salir de clase!). Las competencias intercolegiales (por más que yo fuera una ojota para los deportes y sirviera solo de hinchada!) era un buen momento para socializar con el sexo opuesto (siendo colegio de solo señoritas, ni te cuento el revoloteo hormonal...).
Toda esta confesión viene porque dentro de poco, empiezan las clases... y por ende, Mati tiene que ir al jardín de infantes. Me doy cuenta que todavía está inmaduro para dejar los pañales y muchas personas me dijeron que no lo dejan ir si aún los lleva. Entonces se me había pinchado un poco el globo y la idea de las mañanas para mi solita... pero esta mañana mi madre, pasó por la escuela y las maestras todavía no estaban, habló con la administración y con la portera y le dijeron que no había problema... entonces respiré aliviada, porque estoy ansiosa con que pueda empezar a socializar con otros niños y aprender con las maestras.Y quiero tener la reunión de padres, para saber qué le tengo que comprar, porque me encanta hacer shopping... en las librerías!!! Me llevaría absolutamente todo... lapiceras raras, lápices de colores, tijeras con formitas, cuadernos de colores...soy rara? Y si!!!... ya lo sabían... qué le vamos a hacer?
Y para despuntar el vicio -porque hace mucho que no estudio!- me quería anotar en una academia de bellas artes... hay carreras de tres años, pocas materias y parecen factibles... pero no sé si mi hijo se banca ir al jardín, entonces no quisiera anotarme para después abandonar por no poder asistir...
Y si no es este año, quizás el próximo... mientras el cerebro dé y el cuerpo aguante... Veremos!
Adoraba que empezaran las clases, los útiles nuevos, el olor de los libros (a veces nuevos, otras usados), forrarlos, escribir carátulas y encontrarse todos los días con las amigas/compañeras.
Desde que empecé el jardín de infantes, me gustó siempre asistir a clases. ¡No veía la hora que se terminara el verano!
¿Era traga? Puede ser, nunca me llevé materias. No me la pasaba todo el día estudiando, es más, estudiaba lo necesario pero no era mediocre ni tampoco la mejor de la clase, era simplemente buena alumna. Siempre tuve buenas notas y a veces fui escolta. Nunca me hice la rata, porque alcanzaba con decirle a mi mamá, "mañana no voy"... y ella me dejaba faltar.
Según mi hermana era una nerd aburrida. Pero no es cierto. En el colegio estaban mis amigas, organizábamos fiestas, actos y hasta misas (cualquier excusa era buena para salir de clase!). Las competencias intercolegiales (por más que yo fuera una ojota para los deportes y sirviera solo de hinchada!) era un buen momento para socializar con el sexo opuesto (siendo colegio de solo señoritas, ni te cuento el revoloteo hormonal...).
Toda esta confesión viene porque dentro de poco, empiezan las clases... y por ende, Mati tiene que ir al jardín de infantes. Me doy cuenta que todavía está inmaduro para dejar los pañales y muchas personas me dijeron que no lo dejan ir si aún los lleva. Entonces se me había pinchado un poco el globo y la idea de las mañanas para mi solita... pero esta mañana mi madre, pasó por la escuela y las maestras todavía no estaban, habló con la administración y con la portera y le dijeron que no había problema... entonces respiré aliviada, porque estoy ansiosa con que pueda empezar a socializar con otros niños y aprender con las maestras.Y quiero tener la reunión de padres, para saber qué le tengo que comprar, porque me encanta hacer shopping... en las librerías!!! Me llevaría absolutamente todo... lapiceras raras, lápices de colores, tijeras con formitas, cuadernos de colores...soy rara? Y si!!!... ya lo sabían... qué le vamos a hacer?
Y para despuntar el vicio -porque hace mucho que no estudio!- me quería anotar en una academia de bellas artes... hay carreras de tres años, pocas materias y parecen factibles... pero no sé si mi hijo se banca ir al jardín, entonces no quisiera anotarme para después abandonar por no poder asistir...
Y si no es este año, quizás el próximo... mientras el cerebro dé y el cuerpo aguante... Veremos!
Con este post dejamos bien en claro por qué somos amigas...o no?? ja!!!
ResponderBorrarHaceme un post luego de las características de los útiles en Italia y los de acá...es todo igual o hay muchas diferencias?? Mirá qué pavadas se me ocurren a mí!
Qué lindos esos cursos de la academia!!!! Obvio que si no es este año, será el siguiente, lo bueno es saber que están ahí y que si querés, podés.
beso!!
Pues mañana empiezan los nuestros, sin entender ni papa de castellano pero sí algunas palabras, bastantes ya, en catalán! Veremos...
ResponderBorrarTe animo a que retomes lo que más te plazca. Yo comencé después de muchos años, aunque no inactiva porque seguía dando clases en la Universidad e investigando, a estudiar mandarín. Mi cabeza ya no es la que era, estudiaba para esa rematadamente difícil lengua unas seis horas diarias, y mi nota fue un 6'5. Por los pelos. Pero me costaba mucho memorizar los caracteres chinos, más que a los estudianes de menos edad. Y no me pasaba a mí únicamente, nos pasaba a todos los mayores... en fin. hay que amoldarse.
Ánimo y suerte con el peque.
Te leo desde hace rato y siempre tienes tantas cosas que contar, eres muy amena y tus posts siempre los leo completos. Ya sabes, algunos se leen entre líneas y ya...
ResponderBorrarNo hay problema con los pañales, son muchos los niños que no los han dejado todavía cuando entran a la materna : )
Y bueno sí, no hay que echar campanas al vuelo hasta que el niño esté bien puesto en la materna, que seguro le gusta, vas a ver, se entretienen mucho y mejor que en casa. Mi hija es más pequeña que el tuyo pero va al nido por las mañanas y se divierte bastante, más que en casa, porque a veces la mamá se le pone de mal humor y bueno... tenemos nuestros 15 minutos en los que estamos de los pelos y no se lo merece.
Muchos saludos desde Milán.
Mai, te entiendo completamente, mi parte favorita de los veranos era siempre en febrero, cuando tocaba ir a la librería a comprar los útiles para el año!
ResponderBorrarYo también faltaba mucho, pero siempre con permiso! Creo que es mejor así.
Todavía estoy flasheando con lo que me contaste de las familia de J! Era obvio, pueblo chico...
Jajaja un beso, lo mejor para Mati y su mamá en esta nueva e importantísima etapa! :)
A mí también me gustaba ir al colegio sólo que no lo sabía!
ResponderBorrarTengo que reconocer que mucho no me gustaba cuando se acercaba el inicio de clases, pero es que en menos de una semana me trasplantaban de las profundidades del mar al colegio por mas de ocho horas diarias ininterrumpidas. Recuerdo especialmente que no aguantaba los zapatos pero no porque me quedaran chicos, sino que me costaba acostumbrarme a la sensación de tener lso pies encerrados después de dos meses de arena, pies descalzos y ojotas gran parte del día.
Pero es cierto que era emocionante el primer día, elegir banco, ver qué aula te había tocado y aún más, en primaria ver las maestras que te tocaban! Ni hablemos de comprar lo útiles nuevos, ni estrenar mochila por ejemplo; y el reencuentro con los compañeros.
Y otra cosa que no sabíamos, una vez le dijimos a mi mamá que por qué nunca nos había dejado faltar, y dijo que era porque nunca le habíamos pedido... dudo mucho de eso, pero supongo que de chiquitas nos mandaba igual, y de grandes, como fuimos las dos bastante tragas no queríamos faltar porque depsués implicaba trabajar el doble. Igual me sorprendió la respuesta de que nos hubiera dejado si le hubieramos pedido; pero que nunca lo hicimos.
Volviendo al tema del cole, no sé cómo se manejan allá con el tema del corte de edad, es decir no sé si a esta edad a Mati le corresponde sala de dos o de tres; si es la de dos es una locura que pretendan que vayan sin pañales, y en la de tres, sería seguramente de los más chiquitos y creo que hasta los tres no se puede pedir otra cosa. Yo no lo pasé porque MC dejó los pañales diez meses antes de empezar el jardín, empezó en sala de dos que todavía se podía igualmente. Pero hay una mamá que el nene cumple en junio (o sea de los más chiquitos de la sala, entró a sala de tres con dos años y ocho meses) y estaba preocupada por el tema pañales porque no los había dejado, y no le hicieron problema, y en todo caso lo catalogan de "accidente" y listo ("accidentes" demasiado frecuentes, pero bueno).
Igual está bueno que lo aclaren porque según lo que me explicaron a mí tener chicos con pañales implica tener que contratar a más personal, porque se pierde bastante tiempo cambiando a los chicos y una maestra o auxiliar tiene que dedicar toda su atención al que está cambiando, y tiene mínimo que haber otra que vigile al resto, y si los chicos con pañales son varios, las maestra y auxiliares se tienen que multiplicar en proporción.
Espero que le guste el colegio tanto como a vos y que puedas tener tus ratitos a la mañana, si no es este año el curso de bellas artes será el que viene, y este año dedicate a vos! Yo no podía entender cuando MC empezó el jardín, que las muchas mamás pretendían hacer costumbre el ir a tomar café a una confitería cercana el tiempo que los nenes estuvieran en el jardín. Una vez,si tenés tiempo, lo entiendo, pero todos los días??? Para eso casi ni los mandás al jardín!
Contanos después cómo fue todo.
Besos!
Mis hijos empezaron a ir al jardín a los dos años. Me gustó el resultado con el primero e hice lo mismo con el segundo. Ambos fueron siendo "pañaludos". Como era jardín maternal los admitieron sin problemas.
ResponderBorrarEs que las librerías son atrayentes! cuando voy a las mayoristas para hacer las compras para mi local, compraría de tooodo, pero tengo que pensar sólo en lo que se vende... obvio que siempre termino comprando para mí...
ResponderBorrarMe encanta que tengas proyectos! espero que Mati soporte el jardín y vos puedas empezar lo tuyo.
Besos!
Mi preferido cuando empezaban las clases: la recorrida por Parque Centenario o viejas librerías de textos usados para conseguir los libros "reciclados"!!
ResponderBorrarY me muero con tu experiencia!! A mí también siempre hacerte "la rata" me parecía una tontería, porque si quería faltar, me dejaban sin problemas! Tampoco me quedaba noches estudiando, y me iba impecable en el cole! (mi hermana: toooodo lo contrario pobre!!!)
Buenísimo lo de tener pensado hacer alguna actividad en las horas que el gordo esté en el jardín!! Tranqui con el tema pañales e inicio de jardín. Para las dos cosas, somos nosotras las que damos más vueltas, que ellos que toman todo con naturalidad. Va a ir todo mejor de lo que esperás. Cómo crecen estos chiquitos!!!!!!!!
Besotes!! (y sigo leyendo: me queda un post! jajaj)