Yo me quiero casar (7)

Llegamos a Sciacca, después de 22 horas de pullman, con asientos poco reclinables y un chofer que se la pasó hablando en siciliano y a los gritos con unas viejas sentadas en los primeros asientos y escuchó ininterrumpidamente la radio "Margherita - Sólo música italiana" (música italiana decadente le agregaría yo! Porque hay cantantes italianos buenos... pero la selección musical de esa estación era de lo peor).
Mi mamá estaba contenta de volver a la tierra de su padre, que había conocido a los diecisiete años. Nos decía que el dialecto del sur era más entendible que el del norte (que estaba bastante contaminado por el francés). Pero nosotras que lo oíamos hablar al chofer y a las viejas, nos parecía escuchar una sucesión infinita de “Uuuuuuuuuu”, todas las palabras tenían esta vocal! Hablaban como reemplazando todas las vocales de las palabras con la U... como esa canción que cantaba cuando era chica "Lu mur ustubu surunuuuuu surunuuuuu ustubu lu muuuuuurrrrr"!

Finalmente llegamos a destino y no vimos nada del pueblo porque eran casi las 9 de la noche, así que llegamos a la parada que estaba en las afueras del centro, en un bar llamado "El bar del camionista" (Bar del camionero, con eso les digo todo) así que si la primera impresión es la que cuenta... mejor no contarla!

En la parada, nos esperaban tres autos con otros parientes jamás vistos (era obvio, nunca habíamos conocido a ninguno de ellos, excepto algunas voces de las veces que nos hablábamos por teléfono para las fiestas). A pesar de habernos estudiado los árboles genealógicos como para saber quién era quién, no entendíamos nada. En medio a la confusión parental, sumados los zamarreos, los dos besos y los abrazos que nos encajaban cada uno (nos presentaron una infinidad de tíos, hijos de los primos, hijos de los hijos) nos cargaron en distintos autos a cada uno y nos llevaron a la casa de la "zia Audenzia".

Ahí tuvimos el primer gran shock, la tía era el retrato viviente de mi nonno y al verla no pudimos contener las lágrimas. Estaba paralizada por un ictus (malditos picos de presión! Eso mismo que me había llevado a mi nonno Pippo, a ella la había dejado con una parálisis facial y postrada en una silla de ruedas). Audenzia era la hermana mayor, hablaba en dialecto antiguo y arrastraba las palabras, así que para mi escaso italiano era ininteligible. Pero su mirada celeste y sus arrugas, eran las mismas que las de su único hermano de madre y padre, mi nonno. Cuando ellos eran pequeños, perdieron la madre y el padre se volvió a casar enseguida, teniendo otros siete hijos con su segunda mujer. La madrastra siempre hizo diferencia entre ellos y sus hijos legítimos, y aunque mi nonno Pippo nunca lo notó porque con su añito y medio era la única "mamma" que se recordaba, mi tía con sus cinco años entendió todo y sufrió por esas diferencias toda su vida.

Nosotros nos quedábamos en su casa. Éramos sus huéspedes, pero sin saberlo entrábamos a la casa del Gran Hermano, porque sus hijos nos controlarían en todo y mi madre se convertiría en su enfermera las 24 horas. Nos encontramos en un departamento grande pero despojado de muebles porque los hijos de Audenzia se ocuparon de vendérselos en vida, dejándole a ella la cama ortopédica y un comó con sus portarretratos con las fotos de sus muertos, unos catres armados para nosotras, una habitación para mis padres y un cuartito armado en la lavandería para mi nonna. Así que pasamos del lujo y el comfort del nord al vacío y la austeridad del sud.

Los parientes nos recibieron con milanesas en platos de plástico, un montón de gritos y una heladera vacía. Esa misma noche se peleaban entre ellos para ver con quien salíamos y quien nos acaparaba por más tiempo, sin darse cuenta que después de 22 horas de ómnibus queríamos solamente descansar. A la mañana siguiente, nos despertaron los taconeos de la nuera loca y cleptómana de mi tía, que quería imponernos a sus tres hijos varones como amigos. Nocciola y su marido cornudo, Pasquale (el hijo mayor de la zia Audenzia), vivían en el departamento de arriba y estaban peleados a muerte con Elena (única hermana de Pasquale) y su famillia, que tenían el negocio en el local que estaba abajo de la casa de mi tía. Así que nosotros empezábamos nuestras andanzas sicilianas literalmente en el medio de una guerra familiar.
A pesar del pie de guerra, el día empezaba soleado y ya predisponía de buen humor. Después, con el tiempo, aprendimos que el sol siciliano, no abandona casi nunca, ni siquiera en invierno.
Por instinto de selección y afinidad, nos acercamos a nuestro primo Antonio, el hijo del medio de Elena (prima hermana de mi mamá, así que no sé realmente qué parentezco nos llegaba pero decíamos primos para abreviar!). Sin darnos cuenta con este gesto, indirectamente rechazábamos a Nocciola y su prole, con lo cual el desprecio por nosotros se acentuaba. Y según la óptica siciliana obviamente, si te juntabas con unos... automáticamente te convertías en enemigo de los otros.

La historia de Mr. Love

Antonio era simpático, ni lindo ni feo, flaco pero no tanto, usaba anteojitos pero con onda y por sobre todas las cosas era muy divertido y salidor. Trabajaba en el negocio de los padres, cosía cortinas y hacía cuadros y artículos de decoración. Cual Casanova, tenía amores aquí y allá. Hacía alarde que andaba con todas, pero era poco caballero si lo hacía saber. No le hacía "asco" a nadie... Muchas de sus chicas eran lindas y otras no tanto, entre estas últimas estaba la Bella Treccina (linda trencita), que se había ganado este apodo por las patillas pronunciadas que le hacían sombra hasta la mandíbula, emparentándola por la semejanza a Carlos Saúl Menem.
Antonio hablaba pestes de Bella Treccina, pero siempre, al terminar la noche se encontraba a escondidas con ella.
Al día siguiente de nuestra llegada, Antonio nos presentó a sus amigos: Mimmo y Mr. Love.

Mimmo era tipo osito cariñoso, gordito, educado, hablador, atento, técnico de celulares e instalador de antenas de TV y parabólicas satelitales. Les tiraba onda a todas las chicas conocidas y desconocidas, pero ninguna lo veía con otros ojos que no fueran los de amigo.

Mr. Love, a simple vista parecía serio, pero era una máquina de disparar boludeces que te hacían reir aunque no quisieras. Con Antonio se potenciaba y se entendían al vuelo.
Cuando lo ví por primera vez a Mr Love, estaba cambiadito para salir, con su pelo corto y parado con gel, con un polerón de lana negro y un tapado corto de paño negro con las solapas alzadas.
Bien look tano. "Mmmmmmm lindo, lástima que sea tan flaquito"­—pensé.
Mr Love era flaco, narigón, con pestañas larguísimas, músico y plomero. Por ser tan divertido y jodón, era el personaje requerido de las salidas. Por ser pianista y músico, cultivaba ese encanto que lo hacía interesante y sensible. Mr Love era el soltero codiciado del grupo. Todas revoloteaban alrededor del dúo Antonio-Mr Love, pero a diferencia de Antonio que se concedía a todas y lo contaba después, a Mr Love no se le conocía ninguna historia y por eso no se entendía si estaba con alguien o no. Era un misterio.

Antonio y sus amigos esperaban a las primas argentinas, imaginándonos horribles.
Llegamos nosotras y, por suerte superamos las expectativas, porque no éramos los bichos feos que se habían imaginado... pero seamos realistas, tampoco las super modelos latinoamericanas. Claro que para las bellezas locales, estábamos sobre la media y además éramos exóticamente distintas y hablábamos español!

Y así fue que empezamos a salir todas las noches. No importaba si era inicio o mitad de la semana y ellos tenían que trabajar al otro día. Salíamos siempre. Íbamos a tomar algo en un bar, en otro local, en otro y otro, dábamos vueltas, caminábamos por el centro, íbamos a jugar al pool, a veces a bailar, otras a jugar a las cartas o juegos de mesa. Cualquier cosa hiciéramos la pasábamos bien, hasta nos improvisamos actores y actrices e interpretábamos sketchs. Habían alquilado una casa (bautizada El Kilombo) y ahí nos juntábamos cuando no teníamos nada que hacer, a mirar alguna película en video o a comer unos spaghetti. El Kilombo fue la escenografía, donde se armó la telenovela. Con las primeras salidas en compañía de Antonio y sus amigos, descubrimos las cartas y sin pronunciar palabra, nos dimos cuenta de las intenciones de cada uno.
Antonio se arrimó peligrosamente a Juli, Mimmo me echó el ojo a mí, yo lo miré atentamente a Mr. Love y Mr. Love se fijó en...

mi hermana.

"Hay algo que te quiero decir y no me animo.
Yo se que puede ser el miedo a que me digas que no.

Pero hay algo en tu forma de mirar.
Que me lo dice todo sin hablar.
Hay algo que te quiero decir y no me animo.

No encuentro la manera de empezar contigo.
Te busco por un camino que nunca he recorrido.
Y se que en esa forma de mirar hay algo que me pides sin hablar.
Hay algo que te quiero decir y no me animo.

Te quiero aunque me guardes en silencio.
Te quiero aunque me digas que no es cierto.
Te quiero aunque no hablemos nunca de este amor.
Pero hay algo en tu forma de mirar que me lo dice todo sin hablar.
Hay algo que te quiero decir y no me animo.

No encuentro la manera de empezar contigo.
Te miro y te sonrio como un juego sin motivo.
Te siento tan dificil de alcanzar.
Aunque me este acercando sin pensar.
Hay algo que te quiero decir y no me animo."

(Alejandro Lerner - "Hay Algo Que Te Quiero Decir")

Comentarios

  1. Pues yo me tomé una estrategia... como se me hacía tan corto leer una entrada, me dejé tres enteritas para disfrutar de lo lindo con tu Falcon Crest Siciliano. Estoy divirtiéndome de lo lindo!
    Me quedo siempre con el ¿y??? ¿ya? ¿ya se ha acabado otra vez?
    Ánimo!

    Besitos.

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  2. Verito pensé que me habías abandonado! jajaja
    Me alegro que te guste mi "Falcon Crest Siciliano" jajajaja
    Besos amiga!

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  3. Seguimos con el suspenso!! cuando parecía que se acercaba el final de la historia, viene una intriga más!!

    Será que tiene mucho rating y se van agregando capítulos como en las novelas argentinas?? jaja

    Que bien los describis a los parientes! me recuerdo cuando conocí a alguno de los míos... mi vieja me decía: no se te ocurra aceptar alguna invitación porque si lo haces con uno lo tenes que hacer con todos porque se ofenden!

    Besos y espero la pxma entrada!

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  4. mientras leía la descripción de los parientes me corrió un frio por la espalda... tan parecidos a los mios en galicia...
    llegamos a mr love, obvio que quiero saber como sigue
    esperamos el próximo capítulo

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  5. Y llegamos a Mr. Love! que era pretendiente ... de tu hermana ??? Ah guau! Esto se pone cada vez mas interesante jajajjaja! (que pedazo de chismosa!)
    Me da como miedito la familia tana, con tantas vueltas y tanta pelea ... mirá ... y yo que creía que la mía era la única familia Adams!
    Aca me quedo esperando el desenlace
    besos

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  6. que historia!!!!! me super meto en la trama y esta no me la esperaba jeje
    que dificil la familia italiana! mi bisabuelo era tano, pero no tengo idea de donde! besos !

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  7. JJJJesús!!
    "No sin boda" se está complicando.

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  8. Jajaja!! me perdi con tanta parentela!!!!!!!!!!
    Hicieron bien en irse para el sur porque al final la famosa crisis llegò tambien a estos lares, allà ademas de encontrar el amore tenes sol todo el año :))
    Que kilombo de familia, imagino que no entenderias nada al principio, me reì mucho con Nocciola y su marido cornudo jejeje!!
    A pesar de todo fuè muy divertida tu llegada a Sicilia con ese grupo de chicos que las esperaban, imagino a las cacatuas del lugar se habran querido matar por la nueva competencia :P
    Espero ansiosa el prox. capitulo!

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  9. Ahhh Mai no vale no vale.. creo que me quede en la dos o en la tres.. y ya estas en la siete!!... Tengo que juntar algo de tiempo para sentarme a leer las historias por parte, sino es como agarrar la novela demasiado tarde y se me pierden los verdaderos protagonistas (aunque aca la UNICA protagonista sos vos!)...
    Besitos!

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  10. Noooo... ahora si las lei!. Me encantaaaa... como lo escribis.. Un libro total, y encima nos dejas con la espina de este modo.
    Cativeria total!!!
    Tu descripcion de la familia del sur y de la del norte.. me mato!

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  11. Betty: El final? Esto recien empieza!

    Vir: seran los genes europeos que acomunan los parientes!

    Any: y bue... no era perfecto Mr Love!

    Sofia: bienvenida! y gracias por leerme.

    Anavril: y esto no es nada!

    Luna: las cosas sin complicaciones son menos interesantes!

    Marina: y no sabés nosotros como nos perdimos con los parientes!

    Marce: Qué bueno que te pusiste al dìa!

    BESOS Y GRACIAS POR PASAR!

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  12. Ah, pero esto sí que es una novela con todas las letras!!!
    Por fin se encuentran los protagonistas... pero no en la situación que uno espera!
    Jaja, nunca me lo hubiera imaginado. Sigo intrigada, así no vale che!

    Besos!

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  13. NO ME VAS A CREER! de tanto en tanto surgen estas coincidencias no way en mi vida y me dejan asi
    . _ .

    Ayer estaba con esa cancion en la cabeza! y a mi que ni me gusta y hoy paseando de blog en blog, leyendo, encuentro el tuyo y esta cancion al final!!

    Muy bueno enserio :))
    Sigote :D buen finde!!

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  14. Sarah: bienvenida! Y gracias a las coincidencias del destino! Un beso!

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  15. Esta novela no puede más!!! quiero saber como sigue!!! muy bueno tu relato Mai! beso gigante!

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