La abuela chiquita

La llamaba así porque no superaba el metro cincuenta de altura. Era coqueta. Tenía la piel blanquísima, los ojos grises y las uñas siempre cuidadas y pintadas con esmaltes perlados. Me la acuerdo desde siempre con el cabello corto, de color gris-plateado y armado con ruleros que escondía en uno de los pañuelos de su colección. Cuando yo empecé a comer sola con los cubiertos, levantó el mantel de la mesa de la cocina, abrió el cajoncito y me hizo elegir mi propio tenedor. Me llamó la atención uno con el mango de piedra naranja, y se ocupó de ponerlo en mi puesto cada vez que comí en su casa, hasta la última vez. Los miércoles se juntaba con “las chicas” a jugar al chinchón y timbeaban (por plata) hasta altas horas. No era una grande cocinera, pero hacía un bizcochuelo super esponjoso, unos “malfatti” (tipo albóndigas de arroz y verdura en salsa) riquísimos y siempre tenía unas aceitunas verdes gigantes en salmuera, porque sabía que le gustaban a mi hermana. Era supersticiosa y apasionada de todos los horóscopos que andaban dando vueltas. No tiraba nada, coleccionaba todos los tarritos de yogurt, las bandejitas de telgopor del supermercado y calquier cosa que pudiera servirle, por las dudas. No era la reina del orden ni tampoco de la limpieza, pero en su caos ella encontraba todo. Cuando le regalaban los almanaques, les cortaba la parte de arriba antes de colgarlos, porque ella no le hacía publicidad gratis a nadie. Se acordaba de los cumpleaños de todos y siempre regalaba bombachas rosas para navidad.

Los nietos mayores éramos sus preferidos, al igual que su hijo más grande. No sé por qué, pero se notaba esta diferencia que hacía y aunque los nietos más chicos se esforzaran por hacerse querer, ella comparaba siempre y en sus parámetros ganaban los primogénitos. Siempre se lo hizo notar a mi papá, que vino perjudicado por el sólo hecho de nacer segundo.

Se casó con mi abuelo cuando era jovencita y se separaron después de las bodas de plata, a los 25 años, cuando ella descubrió que él la engañaba con una mujer que vivía a una cuadra de su casa. Nunca más tuvo otro amor y estoy segura que lo amó hasta el último de sus días a “ese gallego pata sucia” (como lo llamaba despectivamente). Nunca dejó de pensarlo y siempre quiso sacarme información, de cómo estaba, cómo lo trataba la otra y demás. Y mi abuelo, a pesar de haber amado a su compañera, nunca le pidió el divorcio a mi abuela ni tampoco quiso casarse con su amante.

Un día, mi abuela chiquita simplemente dejó de comer y se volvió un bebé caprichoso que escupía los remedios y escondía las píldoras en la mano. En una semana, su pequeño cuerpito se volvió aún más frágil hasta que el 24 de marzo de 2002, mi abuela dejó este mundo. Nunca supo que en noviembre de ese mismo año nos íbamos del país. Y creo que fue mejor así, porque conociéndola, le hubiera echado la culpa de su enfermedad a mi papá.

De ella me traje las cartas de amor que le escribió mi abuelo durante el noviazgo y cuando hacía el servicio militar, las encontré en uno de los cajones de su mesita de luz. Estaban celosamente conservadas, atadas con una cinta de raso, guardadas cada una en su sobre y ordenadas por fecha. La caligrafía perfecta y ese tratarse de “usted” hasta para prodigarse amor. También me quedé con sus pañuelos, foulard y pashminas. Creo que inconscientemente, heredé de ella la pasión o manía de tener mi cuello casi siempre cubierto por un pedazo de tela.

De ella me quedaron mil recuerdos y todas sus frases...

Nenaaaaa... no apoyes la cartera en el piso que se te va la plata!

Nenaaaaa... no te barras los pies que no te casás!

Nenaaaaa... no te metas al mar, que no pasaron tres horas y te corta la digestión!

Nenaaaa... no regales la billetera vacía que es pelea!

Nenaaaa.... si te pica la palma de la mano, cerrála que se te va la plata!

¿Te pica la oreja? ¿La derecha o la izquierda? Hablan mal o bien de vos...

¿De qué signo es tu novio? Mmmmmm Leo con Leo no va bien! Buscate uno de aries o de géminis... (Quién sabe qué diría si supiera que Mr Love es de tauro!)

Y este post es para ella... porque a pesar de sus manías, sus desplantes, sus egoísmos con los demás... conmigo fue siempre cariñosa, generosa y a veces compinche... fui su nieta preferida. Y ella, mi querida abuela chiquita.

Mi abuela chiquita y el "gallego pata sucia" cuando todavía no eran abuelos y eran felices.

Comentarios

  1. Mai, me hiciste llorar... la verdad es que mi abuela siempre fue mi mamá y hace 6 años que ya no esta conmigo. La extraño demasiado, y esto que escribís me recuerda a ella.

    Besos

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  2. Qué lindo Mai, lo que escribiste!

    Cuánto amor!

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  3. Yess: Tu abuela siempre va a estar con vos mientras la recuerdes! Y si, se extraña! Besos y abrazos!

    Alicia: Gracias! ;)

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  4. Qué lindo recuerdo, Mai!!
    Me mató el cajón en la mesa de la cocina! Ya había olvidado que las mesas venían con cajón antes!!

    Besoooos :)

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  5. Como se extraña a los abuelos eh? Siempre estaban en todos los detalles y dispuestos a darnos el gusto.
    Hermoso recuerdo para tu abuela chiquita, me dió mucha ternura que la llamaras asi.
    un beso

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  6. que lindos recuerdos tienes de tu abuela!!!
    y que tesoro tan preciado deben ser esas cartas!!!

    me hiciste recordar a mi abuela Teresa... tuve una relación muy similar a la tuya... por lo que te entiendo perfectamente que la extrañes.

    besos

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  7. Que lindo Mai!! que siempre se quede en tu corazon.

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  8. Qué linda tu abuela, pero sobre todo qué lindo retrato que hiciste de ella. Al leerte parece que uno la conociera de siempre, muy humano.
    Hermoso homenaje
    Besos!

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  9. Mai que lindo recuerdo de tu abuela. Me hace pensar en que tengo que aprovechar más a mis abuelos que son dos personas increíbles. beso grande!

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  10. Hermosísimo Mai, me hiciste brotar las lágrimas. Yo soy primera nieta de todos mis abuelos y extraño horrores a mi abuela "grande", ella era alta y pata flaca como yo, sagitariana como yo, sensible como yo, amiguera como yo... siempre una palabra para todo. A su marido no lo conocí, y en cambio tengo otro par de abuelos, los papás de mi mamá, a los que cuido celosamente. Y ellos a mí, ja. Te mando besos grandes, estará súper contenta tu abuela del recuerdo.

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  11. Cuanto me emocionó este post Mai!,yo nunca tuve una imagen de abuela, a pesar de tenerla.. y ahora que te leo me doy cuenta todas las cosas, anecdotas y sentimientos que puede dejar!

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  12. Stella: La única que tenía el cajoncito era la mesa de mi abuela! Su casa era un museo, con eso que no tiraba nada, tenía cada artículo de anticuariado!

    Any: Si que se los extraña! Me queda viva solamente mi nonnina, que vive acá en Italia con mi mamá y la cuidamos todos!

    Betty: No sabés como me transportan esas cartas cada vez que las leo! Al principio me parecía que “violaba” la intimidad de ellos, porque mi abuela nunca me dijo que las tenía guardadas... Pero me encanta tenerlas conmigo.

    Anavril: Seguro! De mi corazón nadie la mueve!

    Lola: Gracias! Quería transmitir un poquito de ella...

    Dolo: Completamente Dolo! Tenés que aprovecharlos y mimarlos! Esos tortolitos maravillosos que tenés de abuelos! Me acuerdo las fotos que subiste del aniversario.

    Maguita: Viste? Ser la primera nieta de todos los abuelos es motivo de orgullo y una responsabilidad! Jajaja Pero es inevitable... en el fondo, somos las preferidas! Espero que le haya gustado a mi abuela chiquita!

    mar: Tengo muchísimas imágenes y recuerdos de ella guardados en mi mente y en mi corazón.

    GRACIAS A TODAS POR PASAR Y COMENTAR! BACI

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  13. Me encantó la historia de tu abuela! Un personaje de antaño, de esos que dudo que vuelva a haber!
    Y una valiente, por separarse, antes no se usaba eso, y menos si aún estaba enamorada. Qué bueno que guardes buenos recuerdos de ella, y esas cartas, valen su peso en oro, te lo digo.

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  14. ¡Me encantó tu Abu Chiquita! ¡Qué cosa con las abuelas y abuelos! Uno de mis abuelos le fue infiel a mi abuela... y el otro se quedó con su amante. ¡Y siempre las abuelas quedan súper enamoradas de estos hombres! Debe tener que ver con la cabeza de esa época, que no les permite salir de la carcel de pensar que pueden volver a enamorarse y ser felices, porque se casaron para toda la vida...
    No sé... me colgué con eso :P

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  15. la cocha de la bela!!!! jajaja asi te decia te acordas amiga?? beso! Carola.

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