Cómo ser una italiana y no morir en el intento (parte I)

Siete años atrás, hubiera deseado que alguien me hubiese dado algunos detalles para que no me hicieran pagar 9 euros un café en la galeria Vittorio Emanuele en Milán, o que me miraran con cara de asco y de costado en una playa por ser depilada y con malla entera. Pero bien, no fue así.
Por haberlo vivido en mi propia piel, no quiero que otro padezca lo mismo. Y es así que nace este servizio a la comunidad, para todos aquellos que deseen viajar a Italia y camuflarse con la población local.

A continuación enumeraré elementos que jamás deben faltar en la cartera de la dama o en la cartera del caballero (los caballeros también usan cartera, más pequeña y cuadradita, pero carterita al fin) y algunas características para ser un europeo de pies a cabeza:

a) LENTES DE SOL. ¿Salir a la calle sin gafas? Olvídalo. Ninguno puede ver tus ojos pegoteados de la mañana o tus ojeras de una trasnochada... ¡La imagen es todo! Así que negros, de colores, con vidrio naranja, con detalles de strass, con forma anatómica, aerodinámica, espejados tipo Poncharelo... como los prefieras, pero metete los anteojos.

b) CELULAR. Viene pegado a los datos personales: Nombre, apellido, celular. Es la tercera pregunta cuando conocés a una persona. Obsoleto quedó aquello de... ¿qué signo sos? ¿Venís siempre a bailar acá? Niente! Número de celular. Para hablar o mandar mensajitos, jugar con los jueguitos, intercambiar tones, escuchar la radio, navegar por internet, sacar fotos, filmar, chatear.... hacer TO DO con el celu. Es el mejor regalo para el recién nacido, dado que una vez bautizado, necesita un telefonito para sus compromisos sociales! Es el mejor regalo para el recién nacido, dado que una vez bautizado, ¡necesita un telefonito para sus compromisos sociales! Y así es que hasta el más pequeño posee un celular. Obviamente, los más grandes... poseen más de uno.

c) BRILLOS. Jamás debe faltar en tu guardarropas al menos UNA prenda brishosssa. ¿Qué sos una monja que tenés todos trapitos sobrios? Pues nada... PELA BRILLOS NENA! Toda mujer europea se mete las luces! Claro que ahí viene la complicación, porque no lo usan solamente para un sábado a la noche...vale para cualquier ocasión out door... llámese comer pizza, ir al dentista, acompañar niños al colegio, etcétera... entonces, si para cualquier eventualidad te clavas la remerita de canutillos y lentejuelas (aunque sean las 2 de la tarde) cuando se tiene un casorio... ¿Te metés un cartel luminoso de neón?

d) PELOS. ¿Qué es una axila sin pelos? ¿Cómo los fideos sin tuco? Si Dios o la madre natura los puso ahí, por algo será... esa es la conclusión europea. Lo que falta decir es que por propiedad transitiva a todo chivo peludo, le corresponde un olor alucinante. Llega a descomponer, provocando efecto nauseabundo y proximidad al desmayo. Porque no se trata de puntitos negros (síntoma que están creciendo y les estás haciendo el aguante para pasarte la cera) ¡Nooooo! Son cabelleras para trenzas. Son barbas de años de cultivo. AS-QUE-RO-SO.

e) BIKINI. No se admite otro traje de baño. Claro que el complemento perfecto es el mondongo y los pelos axilares. Es curioso, si el cavado y las piernas se las depilan, ¿por qué no llegan al chivo? Pero bue... dejemos de lado el tema pelistico. La malla entera no existe. Niñas, adolescentes, adultas, viejas y ancianas... todas con el ombligo al sol. Y claro está, no solo los brillos para la noche... también para el mar! Así que canutillo, lentejuela, piedra, pluma y cuanto accesorio ande dando vuelta va a parar a la lycra. Si no, ¡no es fashion!

f) AROS. De lejos te vi venir, te conocí por el rodete, te hacían tilin tilín... esos pedazos de ARETES!!! Cuanto más grandes, mejor. Argollas, cadenas, llamador de sueños... todo vale. Alguien me dijo una vez: ¡sin aros estás desnuda! Quizás hablaba de aros italianos, son tan grandes que te ponés uno y te cubre hasta los pies. Obviamente, todas tienen los agujeros de las orejas triiiiisssstesss... larrrgooosssss... ¿no sentirán tanto peso?

g) GEL. Puede ser en cualquiera de sus presentaciones: típico gel, espuma, mousse, moco... cualquier cosa que ayude a la rigidez capilar. Si sos un varoncito... mucho pelo parado o en su defecto flequillo aplastado cual lamida de vaca. Si sos una dama, bien tirante para atrás hasta los ojos chinitos o bien te armás los rulos... no importa que quede duro como mosquitero, lo importante es que no se muevan.

Y por ahora esto les alcanza para confundirse entre la tanada, no se preocupen es la primera entrega, no me abandonen que hay mucho más...