El tiempo pasa
y nos vamos poniendo viejos! Pero no te das cuenta de la vejez por el tiempo en sí, o porque te ves arruinado ( o sí, pero hacés de cuenta que seguís siendo "pendex inside") los que delatan sin piedad el paso del tiempo son los niños. Y mi cronómetro personal, está grande y alto, cumplió sus 6 años y los festejamos. Me gusta festejarlo (ya lo saben!) y disfruto hacerle todo. Me hace acordar cuando no existía el cotillón y mi mamá hacía los bonetes, las bolsitas, las tarjetas... supongo que de ahí viene la pasión por decorar las fiestas. Generalmente, hago la fiesta en función del dibujito o juego que Matias prefiere en ese momento. Esta vez le tocó el turno a Frozen. Pero claro, las princesas de Frozen no son lo más adapto para una fiesta de varón y los muchachos del dibujito, tienen roles secundarios... así que opté por el muñeco de nieve Olaf. Empiezo buscando inspiración en Pinterest, me armo la carpeta y a pinear lo que me gusta. Si lo que vi no me convence, sigo en googl...